SIN EDUCACIÓN NO HAY FUTURO
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24 Enero de 2025
De todas las acciones dirigidas a cumplir con el mandato legal de la asistencia integral al menor que ingresa en el Sistema de Protección, una de las más relevantes a largo plazo es la intervención educativa que pueda recibir hasta el momento que lo abandone, alcanzada ya la mayoría de edad. Sin obviar la atención médica, psicológica, jurídica y del resto de necesidades básicas, la educación será, sin duda alguna, la herramineta más poderosa para su integración social y laboral. Con la capacitación adecuada, no solo se estará alejando de la posible marginalidad de la que proceda, si no que además tendrá la oportunidad de desarrollar su potencial de crecimiento y tener una vida autónoma, normalizada y exitosa.
Desde INTERPRODE todo esto se tiene muy claro, y en todos sus centros se trabaja en un doble sentido. Por un lado, escolarizando a todos los menores que pueda acceder a cualquier tipo de enseñanza adecuada a sus posibilidades (primaria, ESO, Bachillerato, IPEP, educación especial…), incluyendo las formaciones prelaborales (F.P. Dual, Módulos…) y, por otro, realizando formaciones internas con los/as menores fuera del horario lectivo (talleres, técnicas de estudio…).
En centros como los especializados en problemas de conducta, (“La Casa”, “Los Olivares” y “Las Nieves”), más del 80% asisten a diario a centros educativos (el resto a través del IPEP). Porcentaje que sube al 100% en los ISL como “Valle del Almanzora” y el CPM Residencia “Cármenes de Purchena” (también COILS cofinanciado Fondo Social Europeo). Pero la educación no es solo desarrollo académico, es también la trasmisión de valores como el respeto, igualdad de género, tolerancia y empatía emocional para contribuir al crecimiento personal de los menores.