CPM "Los Olivares" - Jaén
Habiéndose desvelado los problemas de conducta en adolescentes una problemática de necesaria respuesta administrativa, y atendiendo a la Ley Orgánica 8/2015, de 22 de julio, de modificación del sistema de protección a la infancia y a la adolescencia, la Asociación InterProde ha puesto a disposición de la Junta de Andalucía (Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad), el Centro de Protección de Menores “Los Olivares”, en la ciudad de Jaén, para el desarrollo del Programa Intervención en Problemas de Conducta (a nivel Provincial), a través de un contrato bajo el régimen del concierto social.
Tanto la ubicación como las instalaciones del Centro de Protección “Los Olivares” se configuran idóneos para dar respuesta a las necesidades específicas y problemáticas que puedan presentarse, favoreciendo el desarrollo del Programa en las mejores condiciones y con las máximas garantías.
El entorno donde está ubicado el Centro, en las afueras de la ciudad, pero a la vez perfectamente conectado y accesible a todos los recursos comunitarios, harán posible una convivencia lo más parecido a una unidad familiar normalizada.
En este sentido, su localización en el municipio de La Guardia de Jaén (Jaén), combina lo tradicional con lo innovador, junto a la profesionalidad de un equipo de trabajo humano formado por mujeres y hombres ilusionados con un nuevo proyecto. El trabajo que desarrollará el Centro de Protección de Menores “Los Olivares”, cumplirá con los estándares internacionales y los controles de calidad necesarios, contando con profesionales adecuadamente cualificados y especializados en la materia, así como con unas instalaciones que observan las medidas de seguridad que la intervención requiere, con personas menores con problemas de conducta, dentro de su finalidad educativa. Así, y atendiendo a los comportamientos agresivos y conflictos que caracterizan a estas personas menores, las instalaciones de este Centro cuentan con espacios suficientes y adecuados para su desarrollo personal, garantizando asimismo su dignidad, privacidad y respetando sus derechos.
La finalidad de este Programa será principalmente educativa, tendiendo el proceso de intervención hacia la normalización de su conducta y el libre y armónico desarrollo de su personalidad, en un contexto estructurado, mediante intervenciones terapéuticas especializadas en el marco de un proyecto educativo. Se pretende con ello, lograr estancias temporales que favorezcan la reagrupación familiar, y en caso de imposibilidad, el retorno a su Centro de referencia o su emancipación al cumplir la mayoría de edad. Para ello, en este último caso, se preparará a estos/as jóvenes para su paso a la vida adulta en autonomía, con quienes previamente y de manera consensuada, se trabajará el paso a la emancipación, favoreciendo su empleabilidad y la formalización de redes sociales efectivas y saludables, que puedan ofrecerles un soporte adecuado y estable. Todo ello, mediante un proyecto socioeducativo individual que va a perseguir el bienestar físico, psicológico, educativo y social de las personas menores atendidas.
Además del trabajo a realizar con el/la menor, será fundamental una coordinación e intervención con los familiares referentes, a fin de que se impliquen en el proceso psicoterapéutico apoyando con ello, los cambios y la transformación de la persona menor acogida. Se tratará el problema desde el punto de vista sistémico, donde todos los intervinientes habrán de procurar la transformación y la acción desde lo constructivo, pretendiendo una simbiosis que favorezca el bienestar y crecimiento personal de todos sus miembros, siempre desde el respeto a las singularidades personales y la individualidad.
Perfiles Profesionales
Programas
PROGRAMA DE HABILIDADES SOCIALES Y CONTROL DE LOS IMPULSOS
La intervención irá dirigida a instaurar en los/las menores un repertorio adecuado de habilidades socio-cognitivas y valores que son necesarias para el desarrollo de la competencia social. La finalidad de nuestro Programa de habilidades sociales y Control de impulsos, será prevenir la aparición de posibles conflictos, el afrontamiento de las relaciones de manera activa y positiva, favoreciendo actitudes de respeto y tolerancia, autonomía, la seguridad emocional, la solidaridad, el respeto de las normas y valores..., en definitiva, se intervendrá sobre el desarrollo de conductas prosociales de cooperación.
Así, se intervendrá en la detección y adopción de soluciones ante los problemas, la previsión respecto a las consecuencias de los actos, el desarrollo de actitudes empáticas ante la toma de una decisión, e incluso la puesta en práctica de pautas de conducta adecuadas para la relación social.
PROGRAMA DE INTERVENCIÓN DE LAS CONDUCTAS ADICTIVAS, CON Y SIN SUSTANCIAS
Los menores y las menores con problemas de conducta que acogemos suelen tener una concepción errónea respecto a las adicciones, tendiendo a su normalización, minimización y justificación.
Esta circunstancia incide de manera directa tanto en el consumo de sustancias tóxicas como en el mantenimiento de aquellas conductas adictivas, tales como el uso abusivo de las nuevas tecnologías, los juegos online, videojuegos e incluso las apuestas.
Y todo ello, impulsado por los diferentes medios de comunicación y redes sociales, permitiendo un acceso inmediato a todo tipo de informaciones y publicaciones de forma indiscriminada y no contrastada, que dan lugar a visiones erróneas respecto a las conductas adictivas.
Es por ello fundamental que trabajemos con estos/as menores los factores de protección que eviten tales prácticas así como la aparición de problemas asociados, proporcionándoles herramientas que les ayuden a disminuir y afrontar los factores de riesgo tanto durante su estancia en este Centro de Protección, así como una vez se produzca su integración familiar o/y social.
La finalidad del Programa por tanto, estará dirigida al desarrollo de un pensamiento crítico de las personas menores a fin de que tomen decisiones de manera responsable en relación al consumo de sustancias tóxicas y el mantenimiento de otros comportamientos adictivos. Todo ello, a través del desarrollo de competencias personales y habilidades sociales que favorezcan la interiorización de valores, actitudes y estilos de vida saludables.
PROGRAMA DE INTERVENCIÓN DE LA VIOLENCIA FILIOPARENTAL
Los casos de violencia filio-parental, constituyen un asunto de máxima actualidad e interés por su elevada incidencia y gravedad de las consecuencias, afectando a todos los ámbitos socioculturales, muchos de los cuales, suelen afectar a familias de nivel medio-alto, con la peculiaridad de ser familias adoptantes, colaboradoras y acogedoras. Este tipo de violencia necesita de un tratamiento eficaz, adecuado al logro de la prevención, la intervención específica sobre las repercusiones y el futuro desarrollo armónico y fluido de las funciones parentales cuando los/las menores retornen a su medio. Cada vez más son los casos de menores que presentando este tipo de comportamiento son denunciados por sus padres y acaban siendo atendidos por el sistema de protección.
Estos adolescentes pueden llegar al Centro de Protección “Los Olivares” tras la demanda de la familia al Servicio de Protección de Menores alegando la imposibilidad para controlar la conducta disruptiva de su hijo/a.
Este Programa pretende dar a padres e hijos, y a la familia en su conjunto, una segunda oportunidad para conocerse, entenderse, respetarse y, sobre todo, escucharse. Por un lado, se trabajará para enseñar a los padres un nuevo modelo de educación y de relación con sus hijos y, por otro, se incidirá en mejorar el comportamiento de los menores, en transmitirles cómo manejar sus sentimientos y en definitiva reconducir su conducta.
PROGRAMA DE EDUCACIÓN AFECTIVO-SEXUAL
Los menores y las menores con problemas de conducta que acogemos suelen tener una concepción errónea de la sexualidad. El actual desarrollo de los medios de comunicación hace que todo tipo de información llegue a ellos de forma indiscriminada, aportándoles visiones sobre el ámbito sexual muy alejados de la realidad generando prácticas de riesgo.
A lo largo de estos últimos años se ha visto la necesidad de educarles no únicamente a nivel sexual sino también a nivel afectivo por la necesidad humana de poder querer y sentirse querido, de satisfacción sexual y de sentirse integrado en una red social. En este sentido, no se puede comprender el desarrollo de una adecuada sexualidad sin la mediación afectivo-emocional Si pretendemos construir una sociedad en la que hombres y mujeres podamos convivir en igualdad y sin discriminaciones, es imprescindible proporcionar a nuestros menores una educación afectiva y sexual de calidad. Fomentando actitudes positivas de respeto y responsabilidad.
El programa de educación afectivo-sexual estará encaminado a que la sexualidad sea vivida de forma plena, responsable y enriquecedora y, por tanto, como fuente de salud ya que implica la promoción de valores tales como el placer, el respeto, la confianza, el conocimiento, la comunicación, la igualdad y la diversidad.
PROGRAMA PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO. PROMOCIÓN DE LA IGUALDAD.
Si bien, la violencia de género es un tipo de violencia que sufren también quiénes viven y crecen en un entorno familiar donde está presente. Este tipo de violencia afecta a los/las menores de diferentes maneras, condicionando su bienestar y su desarrollo, ocasionando en muchos casos graves consecuencias causándoles serios problemas de salud. La exposición de los/las menores a esta forma de violencia en el hogar, lugar en el que deberían estar más protegidos, los convierte también en víctimas de la misma.
Por tanto, y ante la posibilidad de detectar casos entre los/las menores que puedan ingresar en este Centro de Protección específico, es necesario contar con un Programa de prevención y sensibilización de la violencia de género, promoción de la igualdad entre mujeres y hombres, a fin de prevenir en el futuro este tipo de conductas. La intervención se enmarcará dentro del principio de la coeducación, evitando las conductas sexistas o machistas.
Para alcanzar esta coeducación los menores y las menores son tratados con igual atención y se les concede el mismo protagonismo, donde los valores y papeles atribuidos tradicionalmente a los hombres y mujeres sean considerados igualmente importantes y transmitidos tanto a niños como a niñas, puesto que forman parte del patrimonio cultural y son necesarios para la vida colectiva.
Este Centro es un espacio idóneo para fomentar e impulsar valores esenciales e imprescindibles para la corrección de esos desequilibrios históricos, valores que contribuyan a lograr la tan pregonada igualdad entre mujeres y hombres, valores que, en definitiva, hagan desaparecer de nuestras prácticas sociales la discriminación por razón de género.Se intervendrá sobre estereotipos derivados de la tradicional división sexual del trabajo, según la cual a los hombres les corresponden las tareas de trabajo productivo, -normalmente remunerado-, y perviven todavía, tanto a nivel subconsciente como en el discurso explícito.
PROGRAMA DE PREVENCIÓN DEL BULLYING Y CIBERBULLYING
Aunque el acoso escolar no es un fenómeno nuevo, es en la actualidad y ante situaciones que han generado una gran alarma social, cuando se ha llegado a tomar conciencia de la dimensión real del problema. Hostigar, amedrentar, humillar, obligar a otra persona a hacer algo que no quiere es, lamentablemente, una experiencia común para un gran número de niños y adolescentes. Debemos tener en cuenta que lo más importante no es la acción en sí misma sino las consecuencias, encontrándose la víctima expuesta a una situación de indefensión reiterada y prolongada en el tiempo, que puede derivar en graves secuelas psicológicas.
Globalmente conocido como “Bullying”, el acoso escolar llega a ser una forma de maltrato, generalmente intencionado y perjudicial, de un escolar/es o estudiante/es a otro compañero, generalmente más débil, al que convierten en su víctima habitual. Suele ser persistente en el tiempo llegando incluso a perdurar durante toda la etapa estudiantil.
Es un tipo de violencia insidiosa, que se construye lentamente en el día a día de las relaciones interpersonales. Es difícil de identificar ya que en los inicios suele ser poco evidente y puede mantenerse oculta a los adultos, pero es bien conocida por el alumnado.
Sea como fuere, trabajaremos con los/las menores tanto los aspectos positivos como los negativos dentro del programa de prevención del uso abusivo de nuevas tecnologías y ciberbullying.
PROGRAMA DE PREVENCIÓN DEL USO ABUSIVO DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS. BUEN USO DE LAS TICs.
Las nuevas tecnologías (internet, videojuegos y teléfonos móviles) se han convertido en una herramienta cotidiana, han hecho nacer en el mundo de los jóvenes un horizonte de nuevas posibilidades y de nuevos problemas. En el plano positivo pueden facilitar y mejorar enormemente las posibilidades de formación y de trabajo, la comunicación, la cultura, las relaciones sociales. En el aspecto negativo, el uso abusivo o perjudicial de las nuevas tecnologías puede traer problemas de adicción, comportamientos asociales y otras influencias perjudiciales en los valores, actitudes y hábitos de vida,…).
Desde este contexto institucional, dado la gravedad del problema social y la importancia de la prevención, entendemos necesaria la puesta en marcha de este tipo de Programas de Prevención para el Uso Abusivo de Nuevas Tecnologías, en aras a concienciar y sensibilizar a los menores y adolescentes sobre la importancia de un uso responsable de las nuevas tecnologías, evitando que su empleo se convierta en una práctica peligrosa e insalubre para los menores, a sabiendas de que puede llegar a constituir incluso un delito.
OTROS PROGRAMAS DE ATENCIÓN A LA VULNERABILIDAD
Asimismo, y además de estas herramientas e instrumentos de intervención, recibirán una atención especializada aquellas personas menores que se encuentren en situación de especial vulnerabilidad, tales como pueden ser las víctimas de explotación, o de trata de personas con fines de explotación sexual o laboral, menores víctimas de violencia de género o menores en condición de refugiados/as, entre otras. Estas personas menores recibirán una atención especializada a fin de intervenir y procurarles la ayuda necesaria para superar estos procesos de posible estrés postraumático que puedan sufrir, tomando las medidas oportunas así como actuaciones necesarias, a fin de lograr una integración plena y el desarrollo personal de los/as menores, primando siempre el interés superior de estos.
Por otro lado, este Centro de Protección de Menores “Los Olivares” contará con un Protocolo de actuación e intervención especializada de carácter terapéutico, para aquellos casos en los que se detecten situaciones de riesgo autoagresivo (autolesiones). Estas personas menores se presentan especialmente vulnerables, dadas sus características personales, y teniendo en cuenta que quizás algunas de ellas hayan llegado a experimentar vivencias traumáticas y desagradables. En este sentido, todos los profesionales del Centro habrán de estar atentos, a lo largo de toda la estancia de la persona menor en este Centro, ante la posible aparición de factores, que puedan ser interpretados indicadores de riesgo; factores de riesgo personales (antecedentes personales, consumo abusivo de sustancias psicoactivas, conducta antisocial, baja autoestima, baja tolerancia a la frustración e impulsividad, problemas de identidad sexual, haber sido víctima de abusos sexuales o maltrato), factores de riesgo familiares (antecedentes familiares, psicopatologías de los padres, violencia intrafamiliar, abuso de sustancias de los padres,…) y factores de riesgo sociales (ausencia o pérdida de red social, aislamiento social, acoso escolar, sentirse rechazado o discriminado, ruptura sentimental, …) que detectados en su momento, pueden evitarse posibles situaciones autolesivas. En este sentido, la puesta en marcha de estrategias de actuación preventiva y una rápida intervención del Personal del Centro, atentos a la detección de pequeñas señales de alerta, podrá evitar que se produzca una conducta de este tipo, si bien hay que entender que la conducta humana es imprevisible en muchas ocasiones.